sábado, 28 de julio de 2012

 La originalidad de hoy en día se basa en ser igual al resto.

Aaai bebé, ahora que te me fuiste, ¿qué voy a hacer sin vos? La verdad que no tengo idea, no sé cómo seguir adelante. Estos días sin vos fueron una tortura, no tenés idea de lo que es llegar a casa y que no estés, que nadie me despierte a las 6 de la mañana con languetasos, no sabés lo que fue ver tu puff sin que estés vos allá arriba, y menos tenés idea de lo que es ver esa cosa que antes tenias en la cabeza todo el tiempo tirado en el piso, vacío, sin nada ahí adentro.
El martes fue un día trágico, horrible y que nunca voy a olvidar. Fue el día en el que te me fuiste, en el que te vi por ultima vez. Estabas sufriendo cosas espantosas, se veía en tus ojitos que estabas sufriendo, y eso era lo peor de todo, se notaba que sufrias aunque no dijeras nada. Entonces ahí decidimos todo, decidimos sacrificarte para que no sigas sufriendo.
Maldito cáncer. 
No tenés idea de lo que te lloramos con mi papá, lo que te extrañamos gordita. Es que... parecías eterna, siempre ahí, moviendo la cola para nosotros, mimándonos y dandonos tanto amor, que parecía increible que algun dia no estés más, pero pasó, y ahora... ahora no estas más. No recuerdo un dia de mi vida en el que no hayas estado conmigo, me acompañaste en taantos momentos, en tantas pérdidas, en tantas risas, en tantos llantos.
Te juro que a veces, a la mañana cuando me levanto, siento escucharte, ya es tan cotidiano que supongo que mi mente hace esos propios ruidos para no sentirme tan vacía, tan sola. La otra vez me estaba mirando en el espejo, y esperé a que apareciese tu cabesita por ahí, inspeccionando lo que estaba pasando, y adivina qué? no apareció, me quedé mirando la nada, y no apareciste. Creo que en ese momento me dí cuenta de que me faltabas, y mucho.
La verdad es que no me río desde el Martes, que raro no? vivo riendo, ves cuanto te necesito? Cada vez que me preguntan cómo estoy, les digo que bien. Que mentira tan grande. Si supieran cómo me siento, ni siquiera preguntarían.
Es horrible, me siento sola, vacía, como si me faltara algo, y ese algo sos vos.
Te lloré como solamente le lloré a mi abuelo, y la verdad que cada vez que me acuerdo de vos, me pongo a llorar de nuevo, como ahora, es una lágrima atrás de la otra y mi cerebro preguntándome ¿por qué? ¿por qué me tiene que pasar esto, justo ahora?
Cuando creía que todo estaba bien otra vez, ahi tuvo que venir y BUM, el maldito cancer me arrancó una parte de mi vida de la nada.
Me pasé dos días llorando, y pensé que no tenía más lágrimas para llorar, pero se ve que no, acá están de nuevo.
Bebé, te amo jose, mi amor, sos la mejor mascota que puede existir.
¿Si la muerte es tan común, por qué duele tanto?
Te amo chiqui, no es un adiós, es un hasta luego. te amo, ahora, mañana y siempre.

domingo, 6 de mayo de 2012

- ¿Por qué te siguen gustando los Jonas si nunca los vas a conocer?
- ¿Y por qué respirás si sabés que te vas a morir?

lunes, 5 de marzo de 2012

El amor se puede encontrar a la vuelta de la esquina.
En mi vida leí muchas novelas, demasiadas diría yo, algunas que enserio eran adictivas, y otras que eran muy malas. Con muchas hasta lloré, tanto de tristeza y de emoción, como de risa. Con otras me sentí identificada y soñaba con que mi vida fuese así, que todo fuese color rosa, y que todo tuviese un final feliz.
Pero descubrí algo que en ninguna de aquellas novelas existía: las emociones. Osea, sí, pero todo era ficción. Lo que cada uno vive día a día no es lo mismo vivirlo que leerlo. Si toda mi vida hubiese sido un cuento, hubiese sentido lo mismo todo el tiempo, pero al vivirlo es diferente, no es que cada cosa que nos pasa sea más emocionante que la de los libros, porque obviamente no, pero la sensación en nuestro cuerpo, esas cosquillas que nos recorren el estómago cuando nos gusta alguien, esa adrenalina que hacemos cuando hacemos algo relativamente peligroso, ese miedo al futuro, esa decepción al pasado, y los otros miles de sentiemientos que sentimos el día a día cuando vivimos, en una novela no se sienten.
La vida puede parecer cotidiana, pero aún así todos los días descubrimos o hacemos algo nuevo.
Nuestra vida, nuestro destino, lo armamos nosotros, nosotros elegimos el destino que queremos. En los libros ya está escrito, y el final es hermoso, sí, pero no es lo mismo. Puede que nuestra vida sea un desastre, y que nuestro final sea triste, pero siempre hay una razón por la cual sonreír, y sonreír de verdad.
Puede que la vida no sea perfecta, que hayan mil razones por las cuales derrumbarse, pero siempre habrá mil y una para volverse a levantar, y todo con esfuerzo, luchando por lo que queremos. En cambio en el libro, el personaje -por más que seamos nosotros mismos.- crea su propio destino. Y nos guste o no, ese personaje no somos nosotros. 
Y yo lo prefiero así.

sábado, 4 de febrero de 2012

Me acuerdo cuando teníamos 6 años y jugábamos en el patio de mi casa, me acuerdo la infinidad de veces que nos retaban por lo que hacíamos, pero en el fondo todos se morían de risa. Me acuerdo de todas las lágrimas que salieron de nuestros ojos cuando no sabíamos si nos ibamos a volver a ver, y todas las promesas que nos hicimos.
TE AMO HERMANOOOO!

No voy a volver a caer en sus trampas. No voy a dejar que otra vez jueguen conmigo. No voy a hacerles caso a sus palabras. No voy a enamorarme cada vez más de ellos con cada cosa que dicen o hacen, mientras le están diciendo las mismas cosas a otras chicas.
NO ME VOY A VOLVER A ENAMORAR.